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Estás en Historia de Tattoo Ganso

HISTORIA DEL ESTUDIO
TATOO GANSO

Todo se remonta a mi infancia, con mi fascinación por aquellos dibujos que sin parar coloreaba con mis pinturas.
Siempre he sido un entusiasta del dibujo y  del arte. Pero llegada mi juventud comencé a  experimentar cambios  en mi que me llevaron por otros caminos, dejando un poco de lado mi vocación. Creo que a esto se le llama "edad del pavo". Fui centrando toda mi atención en las motos, la cerveza,  el rock y las chicas.  Tras unos años algo moviditos, me tocó cumplir con la patria como  buen españolito. Y allí fue donde me topé con  lo que no me esperaba: pieles curtidas por el sol del desierto llenas de tatuajes. Esto hizo despertar de nuevo en mi aquella afición al dibujo, de una manera más fuerte aún al ver con que poderío mostraban sus tatuajes aquellos hombres.
 
Todos contaban a través de ellos algo importante  de sus vidas (seres queridos, amores, guerras, etc).  Fue donde tuve mis primeros escarceos con las agujas y la tinta. Por suerte pude coincidir con uno de los responsables de aquellas obras de arte, lo que medio la oportunidad de conocerlo y aprender su técnica. ¡Qué recuerdos!, varias agujas atadas, un bote de tinta china y mucha paciencia, eso era todo lo necesario en aquel remoto lugar para plasmar en un cuerpo humano un recuerdo o un sentimiento, el cual duraría de por vida. Bueno, vale ya de sentimentalismos, ¿no?la experiencia militar, que por suerte compartí con mi gran amigo Felipe, y tras la fascinación de lo visto en las pieles de los legionarios, volvimos a casa y nos decidimos a adquirir un equipo de tattoo para hacer nuestros primeros pinitos con amigos y familiares. Jejeje, que nos perdonen pero puedo decir que algunos trabajitos fueron auténticas obras de arte cubista, jejeje.como la vida seguía su curso, ante eso no se puede hacer nada, tuve que ponerme a trabajar, aprender un oficio y así ganar  algún dinerillo para seguir costeándome el material de tatuaje, las cervezas, la gasofa y las necesidades básicas, ropa, comida, etc.
 
Todo ello sin dejar de lado aquella obsesión que nació en mi con el tatuaje. Sin darme cuenta  pasaron algunos añitos, y pude apreciar la mejora en mi técnica y en mis trabajos, y  por ello decidí lanzarme y formarme en condiciones. Decidí titularme haciendo un curso homologado tanto de tattoos como de piercing. Así, continué alternando mi trabajo con el tatuaje, hasta que caí en la cuenta que realmente mi trabajo era tatuar y lo otro, un simple medio para ganar dinero. Muchas veces me considero un privilegiado por poder hacer de mi pasión un medio de vida.final tomé la decisión de abrir mi propio estudio de tatuajes.
 
Sin importarme las consecuencias económicas que podría acarrearme el lanzarme así, busqué un local que se amoldara a mis necesidades, lo acondicioné como establecen las leyes, actualicé todo mi equipo y a tatuar. Todo esto era algo nuevo para mi, tener mi propio negocio era una aventura apasionante. Pero realmente yo no pensaba en eso, embargado por la ilusión de ver un sueño hecho realidad. Todo comienzo es difícil, pero gracias a los amigos todo fue más fácil. Ya son  9 años con las puertas abiertas del estudio, viendo pasar clientes y amigos satisfechos con los resultados. Espero poder seguir compartiendo e inmortalizando las vidas y experiencias de las personas en su  piel.
 
Solo me queda dar las gracias a mi mujer, a mis padres y hermanos por su gran ayuda y  apoyo,  y a todos los clientes y amigos que han hecho posible que mi sueño se haga realidad.
 
¡¡Nos vemos pronto!!


 
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